miércoles, 26 de octubre de 2011

Totales bestiales


   En esta ocasión mis pensamientos se van hacia algo de lo que tenía ganas de hablar. Todas y todos los que nos dedicamos a trabajar la actualidad informativa para un medio de comunicación, hemos sufrido ese momento en el cual debemos grabar las declaraciones de una persona y solo tenemos esa oportunidad para hacerlo, automáticamente se genera en todo el grupo de reporteros/as  e informadores,  la ansiedad y el egoísmo por ser los mejor colocados, por tener las mejores imágenes y conseguir que nadie se coloque delante de tu objetivo o tu micrófono. Visto desde fuera, no me extraña que nos comparen con animales carroñeros, pues nos damos empujones y pisotones, estamos unos encima de otros, a veces nos gritamos con ira y todo por conseguir esa imagen ese sonido irrepetible,  ¿irrepetible?. Es normal que este tipo de situaciones se desarrolle en la vía pública a ojos de todo aquel que en ese momento esté por ahí, es todo un espectáculo lamentable, aunque una vez terminado todo,  volvemos a ser colegas, pero ese momento anterior nos despoja de cualquier razón cuando pedimos que respeten nuestro trabajo, nosotros mismos,  con nuestra mala educación nos estamos desacreditando, aunque después defendamos nuestra profesionalidad. Hay maneras de desarrollar ese mismo trabajo de forma más profesional y digna, tanto para nosotros mismo como para la persona que nos ofrece gratuitamente sus declaraciones y a la cual, también en muchas ocasiones ofendemos con nuestra actitud carroñera. Siempre he defendido que estos momentos hay que planificarlos, dialogando entre todos los medios allí reunidos y organizar una rueda de prensa in situ, donde todos podamos trabajar, no solo el buitre que llegue primero.





No hay comentarios:

Publicar un comentario